Roncal

En el Valle de Roncal, agua, humedad y silencio. Aldeas desperdigadas, soledad en las calles. Hermoso paisaje: todo puro, todo plenitud. Un mundo escondido, a 90km de Pamplona, entre montañas, donde el agua pide su sitio. Una señora limpia al lado de la casa. Le divierte? hablar con nosostros. No hay nadie por las calles. Empinadas calles, resbaladizas. El moho en las paredes señala la humedad constante. Pero la naturaleza reclama su espacio. Allí se vive más: el frío conserva los cuerpos. La niebla desciende en su lucha con el sol. El sonido del agua dirigiéndose hacia el embalse. El valle de Roncal con sus pedanías sin gente, con sus mayores que no quieren alejarse de la tierra que los vio nacer.Un mundo ecológico, sin contaminación nos envuelve. Llegados de la ciudad, nos encontramos traspasados por la belleza de la naturaleza. Aconsejo el recorrido.