Nada
nuevo. Mas bien, escaso.
Saber
ver.
Entró
rápido en el recinto, un portal de sombra y viento. El siguiente paso lo
adentró en una oscuridad visible. Cada cuadro estaba iluminado por la luz de la
inspiración. En toda obra se esconde los ojos que miran y el pensamiento que lo
elaboró. Era martes y hacía frío en el exterior; por eso decidió consultar
aquellos conocimientos que había ido adquiriendo durante años sobre el arte y
la historia. De este modo sintió una comunión especial con lo que iba
observando, fruto de la evolución de cada época. Algunas figuras mostraban un
realismo perturbador por decir algo: consejo, riña, precaución, amor,
nostalgia,…Otras, sin ese don necesitaban otorgarles un tiempo, lugar, momento
o actuación. Quizás pudiera uno imaginar la idea que se escondía en lo
profundo, el fondo de la obra, en función de la forma y situación en que
aparece,
Rápidamente
se mezclaban historias en su cabeza. Era el fruto de la cultura. La
interrelación de los temas, la forma de la composición, el espíritu de la
época, la luminosidad de los pinceles, el cubismo de las vanguardias, el
realismo de los cincuenta, la interpretación de los clásicos…Aquel hombre
parecia una enciclopedia: conocimiento enciclopédico, que significa
interrelacionar la historia de cómo alguien interpreta de otra manera una
realidad conocida. Quería comentar con alguien estas ideas, con alguien que
tuviera estas ideas de la historia del arte, no con alguien de ”qué te
parece?”, “¿te gusta el cuadro?” .. o preguntas parecidas para obtener
respuestas sin sustancia. Si no los has recorrido, si no lo has trillado, el bálago resulta demasiado áspero y pesado.
Comprender
una “obra” no es una tarea para cualquiera, sí sentir la emoción o no ante la
misma.
Salió
del recinto con estas reflexiones, Era martes y la tarde se tornaba fría y
lluviosa, a ratos ventosa, iba a decir llorosa por los recuerdos que tanta
creación trasmite, llorosa por el silencio de no compartir el conocimiento
enciclopédico de formar parte, de estar en otra onda distinta en la admiración
e interpretación de lo esencial, lejos del sentir de la obra. del pasar,
recorrer, caminar por salas y cuadros en unos minutos sobre los que alguien
dedicó o tendría que haber dedicado tiempo.
Pero
nada nuevo.
Otra
forma de presentar, de querer decir, una acumulación de elementos, a los que le
dieron un sentido sin sentido.
Hace falta algo más para el Arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario