MILAN KUNDERA

LA FIESTA DE LA INSIGNIFICANCIA, EDIT. TUSQUETS

Del encuentro de unos amigos y de la fiesta que celebran da pie a Kundera para exponer algunas ideas, que es lo que contiene el libro:

1.-El amor: hace una crítica basándose en los conceptos de INDIVIDUALIDAD/UNIFORMIDAD:

-“..si un hombre ( o una época) ve el centro de la seducción femenina en los muslos, ¿cómo describir y definir la particularidad de semejante orientación erótica?(...)la longitud de los muslos es la imagen metafórica del camino,(...) que conduce hacia la consumación erótica.(..)

Si un hombre (o una época) ve el centro de seducción femenina en las nalgas,¿cómo describir y definir la particularidad de esa orientación erótica?(...) el camino más corto hacia la meta,(...)

Si un hombre (o una época) ve el centro de seducción femenina en los pechos, ¿cómo describir y definir la particularidad de esa orientación erótica?(..) santificación de la mujer;(..)el sexo masculino arrodillado ante la noble misión del sexo femenino.

Pero ¿cómo definir el erotismo de un hombre ( o de una época)que ve la seducción femenina concentrada en la mitad del cuerpo, en el ombligo?(..)(págs.11-12)

(..)el ombligo no dice nada de la mujer que lo tiene, habla de algo que no es esa mujer.(pág.128)

-antaño, el amor era la celebración de lo individual, de lo inimitable, la gloria de lo único, de lo que no admite repetición. Pero el ombligo no sólo no se rebela contra la repetición, ¡es una llamada a las repeticiones!”(pág.129)

2.-Otra crítica -la que predomina- es la referente a las relaciones humanas: pedantería, engaño, comentarios triviales o frases ingeniosas en las reuniones, sobre todo en grupos, uso de un idioma distinto como escudo para abordar la realidad de una manera seria, porque si es en broma nadie se lo creerá, ya que se carece del “infinito buen humor” del que hablaba Hegel.

3.-Conceptos como la REALIDAD/MUNDO y HUMANIDAD son puestos en crítica. Para ello acude el autor a Kant y Schopenhauer, lo cual le da pie para hacer una crítica al Stalinismo, al poder y a las democracias. La idea es muy simple: hay una realidad externa a nosotros que llamamos mundo, que no es más que representación que para hacerse real se necesita de una voluntad que la impondrá.Por tanto hay tantas representaciones del mundo como personas. Este desorden se regula imponiendo una única representación a través de una única voluntad: la del que manda. Para éste la humanidad es su propia representación, lo que tiene ante sí. Hoy las democracias, también, quieren regular esto: el estar en el mundo a través de los derechos humanos, derechos incompletos ya que no regulan los aspectos básicos del hombre: la existencia, la eutanasia, el nacer hombre o mujer, el color de los ojos, el país, o el momento. Por otro lado históricamente, con el paso del tiempo, los grandes personajes dejan de ser y se convierten en marionetas.

4.-Por tanto, estamos en “la fiesta de la insignificancia” que “es la esencia de la existencia. Está con nosotros en todas partes y en todo momento. Está presente incluso cuando no se la quiere ver..(..) esta insignificancia que nos rodea es la clave de la sabiduría, es la clave del buen humor”