Estamos en El Rocío, se oyen las carretas y la algarabía, las palmas y el ave María, se oyen las esquilas de los caballos, el piar de los milanos, y salpica el agua de los charcos, del pantano. Andalucía en fiesta de romería, salve marinera, una iglesia blanca y una Virgen dorada, barroca.
Limpia la iglesia,nos adentramos hasta el Retablo: una virgen que te mira desde lo alto, querubines por todos los lados, escenas de la pasión, movimiento, dolor.
Y el cura: "silencio, por favor..." Quiero hacerme una foto, y no hay manera.
Salgo al exterior: edificios de cofradías, bares y restaurantes, caminos polvorientos que no calles.
Me adentro en uno, para tomar la manzanilla y el pescaíto: es la hora.
"¿Conocen ustedes el parque?
No
Pues no se lo pierdan, es un paseo muy agradable.
Era cierto, lo recorrimos, nos fijamos en el espacio protegido: milanos, garzas, pavos,...diferentes cánticos de aves,..a lo lejos, los caballos salvajes, merece la pena
Naturaleza y urbe, y la Virgen esperando a que la saquen en volandas. Eso es
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