En el arte clásico predomina el desnudo masculino; en la visión del artista actual, Maté, la cabeza del caballo, de lo que falta, unida a lo que existe. Helo aquí una nueva interpretación: nada de rencor, nada de mirar al pasado, hombre y caballo en unión material y espiritual. Uno interpreta lo que ve y añade lo que falta: es un juego de niños.Esta es en escayola, aquella en piedra, en granito. Un desnudo masculino sobre lo que falta: un caballo desnudo. Quizás lo importante son las líneas, las curvas de un cuerpo formado en la equitación. Este, el moderno, deja un poco que desear, a pesar de que hoy vivimos en una admiración al gimnasio.
Otra pregunta:¿Por qué rellenar lo incompleto? Damos una pista, lanzamos un murmullo, y todo el mundo se lo cree.El arte, cualquiera, en la mayoría de los casos, se trata de insinuar. También en la vida ordinaria. Insinuar es decir, dirigir y completar con la mirada .
No hay comentarios:
Publicar un comentario