viernes, 17 de abril de 2015

Santa Teresa de Jesús

LA VIDA
Se ha cumplido el V centenario de Santa Teresa de Jesús, natural de Ávila, que nació a las cinco de la mañana el 28 de marzo de 1515, un miércoles, en una casa con 11 hermanos más, y cómo se han leído en la prensa tantos disparates, aquí van algunas aclaraciones sobre SU VIDA .
Es un libro que, no sé por qué, como diría la Santa, no te deja indiferente. Por tanto, aconsejo su lectura.Se pensará que “la vida” de Santa Teresa es su biografía, pero nada más lejos; no es una biografía en sentido estricto, sino más bien en el sentido espiritual.”La vida” es una reflexión espiritual de la Santa que resulta reflexiva también para el lector, quien no queda indiferente por varias razones:
a) por la sencillez expresiva y narrativa; hay una búsqueda a contar los hechos de manera natural, tal y como se habla.
b)Porque cuando la Santa intenta explicar su evolución espiritual se observa los enormes problemas con los que se enfrentó, sobre todo dos: su débil salud y su falta de poder racionalizar “lo espiritual”. Son estas dudas que manifiesta constantemente lo que la hace más atractiva.
c) Por su carácter didáctico y en cierta manera ameno. Santa Teresa intenta ser sincera con el lector, pero también didáctica, exponiendo mediante comparaciones y ejemplos aquellos temas difíciles de explicar.

En resumen, la obra refleja las etapas espirituales de la vida de la Santa (unión del alma y goce con la presencia de Dios) -cómo evoluciona su mundo espiritual que puede servir para los demás- y que termina con distintas visiones de la Santa
                                          Nicola Fumo: Transverberación de Santa Teresa.1725

IDEAS:-NO LAS ORDENO POR TEMAS, SINO POR ORDEN NARRATIVO, FIJÁNDOME: a) En su enfermedad o según los entendidos , en su anorexia; b) en las justificaciones que hace la Santa sobre la NADA que es la vida; c) en la dificultad de expresar su religiosidad, e incluso, sus dudas; d) en sus visiones de Cielo e Infierno basadas en tópicos que nos han llegado hasta hoy; y e) finalmente en la sencillez de su estilo.)
...dióme una gran enfermedad que hube de tornar a casa de mi padre.(Cap.III)
-..vine a ir entendiendo la verdad de cuando niña, de que no era todo nada.(Cap.III)
-En esta batalla estuve tres meses forzándome a mi misma con esta razón: que los trabajos y pena de ser monja no podía ser mayor que la del Purgatorio...(Cap.III)
-Habíame dado, con unas calenturas, unos grandes desmayos, que siempre tenía bien poca salud.(Cap.III)
-Dióme aquella noche un parajismo (paroxismo)que me duró estar sin ningún sentido cuatro días, poco menos. En esto me dieron el Sacramento de la Unción(...)Teníanme a veces por tan muerta,que hasta la cera me hallé después en los ojos”(Cap.V)
-El extremo de flaqueza no se puede decir, que sólo los huesos tenía ya. Digo que estar ansí me duró más de ocho meses; el estar tullida, anque iba mijorando, casi tres años.(Cap.VI)
-Represéntoseme Cristo delante con mucho rigor dándome a entender lo que de aquello le pesaba. Vile con los ojos del alma más claramente que le pudiera ver con los del cuerpo...(cap,VII)
-...tuvae veinte años vómitos por las mañanas, que hasta más de mediodía me acaecía no poder desayunarme; algunas veces más tarde. Después acá, (…),es a la noche, antes que me acueste,(...) que tengo yo de procurarle con plumas u otras cosas. Porque, si lo dejo,es mucho el mal que siento..(cap.VII)
-Para mujercitas, como yo, flacas y de poca fortaleza...(Cap.XI)
-..traer a la memoria lo poco que dura todo, y cómo no es todo nada, y en la nonada que se ha de estimar el descanso.(Cap.XV)
-Es ansí que me parecía, cuando quería resistir, que desde debajo de los pies me levantaban fuerzas tan grandes..(Cap.XX)
-Porque, anque pocas veces se pierde el sentido, algunas me ha acaecido a mí perderle del todo, pocas y poco rato.(Cap.XX)
-...como después diré, u queda ya dicho: todo cansa, todo fatiga, todo atormenta.(Cap.XXVI)
                                                Alba de Tormes, donde murió la Santa.

 -..mas parecíame estaba junto cabe mí Cristo y vía ser Él el que me hablaba, a mi parecer.(Cap.XXVII)
-...quiso el Señor mostrarme solas las manos, con tan grandísima hermosura,(..) vi también aquel divino rostro(...) Después me había de hacer merced de que yo le viese del todo(..)(Cap.XXVIII)
-No ha querido el Señor darme a entender el cómo, y soy tan ignorante y de tan rudo entendimiento que, anque mucho me lo han querido declarar, no he aún acabado de entender el cómo.(Cap.XXVIII)
-Pues se imaginación esto es imposible de toda imposibilidad..(Cap.XXVIII)
-..y ponía comparaciones como yo podía y el señor me daba a entender.(Cap.XXVIII)
-..vía un ángel cabe mí hacia el lado izquierdo en forma corporal,(...) Víale en las manos un dardo de oro, largo y al fin de el hierro me parecía tener un poco de fuego.Este me parecía meter por el corazón algunas veces, y que me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. (Cap.XXIX)
-Otras veces me da una bobería de alma,(...)que ni bien ni mal me parece que hago, sino andar a el hilo de la gente, como dicen; ni con pena, ni con gloria, ni la da vida, ni muerte, ni placer, ni pesar: no parece se siente nada.(Cap.XXX)
-..vi una gran contienda de demonios contra ángeles.(Cap.XXXI)
-..me hallé en un punto toda,(..) que parecía estar metida en el Infierno.(...)..la entrada a manera de un callejón muy largo y estrecho, a manera de horno muy bajo y escuro y angosto. El suelo me pareció de un agua como lodo muy sucio y de pestilencial olor, y muchas sabandijas malas en él. A el cabo estaba una concavidad metida en una pared, a manera de una alacena, adonde me vi meter en mucho estrecho.(XXXII)
-Una cosa quiero decir ahora aquí.(Cap.XXXIV)
-¿Y qué más perdición, qué más ceguedad, qué más desventura que tener en mucho lo que no es nada? (cap.XXXIV)
-¡Oh, válame Dios, qué vida ésta tan miserable! No hay contento siguro ni cosa sin mudanza (Cap.XXXVI)
-Parecíame estar metida en el cielo, y las primeras personas que allá vi, fue a mi padre y madre, y tan grandes cosas en tan breve espacio(Cap.XXXVIII)
-..porque en solo la diferencia que hay de esta luz que vemos a la que allá se representa, siendo todo luz, no hay comparación, porque la claridad de el solo parece cosa muy desgustada.(Cap.XXXVIII)
-..yo estaba riéndome entre mí y habiendo lástima de ver lo que estiman los hombres, acordándome de lo que nos tiene guardado el Señor.(Cap.XXXVIII)
-Vile subir al cielo con grandísima alegría (el Provincial) . Él era ya bien viejo,más dile de edad de treinta años..(..) ...más de quince días que era muerto.(cap.XXXVIII)
-..vile subir al Cielo con mucha gloria (hermano de la Compañía de Jesús)(...) y vi cómo era muerto y subir al Cielo sin entrar en Purgatorio. Murió aquella hora que yo lo vi, sigún supe después.(Cap.XXXVIII)
-¿Qué se me da, Señor, a mí de mí, sino de Vos?(Cap.XXXIX)
-Estaba una vez en oración y vino la hora de ir a dormir, y yo estaba con hartos dolores y había de tener el vómito ordinario (cap.XL
-Otras veces estoy de manera, que ni siento vivir, no me parece he gana de morir, sino con una tibieza y escuridad en todo...(Cap.XL)
-...esta es mi desbaratada vida,... puniendo lo que ha pasado por mí con toda la llaneza y verdad que yo he podido-(Cap.XL)
-...ha sido tan poco el tiempo que he tenido, que no podía tornar a ver lo que escribía.(Carta epílogo..)



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